EFE
Madrid
El Pájara Playas consiguió un empate ante el filial atlético en un encuentro en el que comenzó atrás, que poco fue ganando metros tras estudiar al rival, que consiguió empatar, pero que terminó pidiendo la hora por el cansancio y por los incisivos ataques locales.
El Playas salió con calma al terreno de juego del Cerro del Espino. Con la permanencia asegurada y con la liguilla de ascenso algo lejana sólo pretendía mantener el honor ante el filial atlético.
En los primeros compases del encuentro cedió la pelota al cuadro rojiblanco y le esperó algo retrasado, quería estudiar el planteamiento del rival, amoldarse y ver la mejor manera para conseguir el primer tanto. Y todo con una defensa muy compacta con los medios centros muy cercanos.
Así, la iniciativa se la cedió al Atlético. Hubo varios acercamientos, sacados sin problemas por la zaga, aunque en alguno Ramón se tuvo que emplear a fondo como un mano a mano de Rubén Ramos en el 21 o un zapatazo al borde del descanso. Aparte de eso sólo algún remate de cabeza sin peligro y poco más.
El Pájara Playas, sin embargo, con el transcurso de los minutos fue tomándole la medida al encuentro. Los medios comenzaron a tocar la pelota y se fueron ganando metros y acercándose a la meta de Mario. En un principio con un juego muy directo por el centro, para posteriormente buscar algo más la bandas.
De entre todos emergió la figura de Uri, primero con una internada en el área y un lanzamiento a la base del poste izquierdo de Mario, que atajó bien, y poco después en un saque de córner, con el ocho en el segundo palo, que cabeceó fuera.
Pero el Atlético tenía peligro en sus ataques, y con el Pájara Playas más despegado debía tener cuidado en su defensa, pero salvo el último cabezazo de Rubén Ramos, supo detener toda ofensiva local.
En el descanso, los entrenadores animaron a sus pupilos a buscar el partido. El Atlético, tras una temporada rondando el descenso ahora se ilusionaba con la liguilla. Además una campaña durante la semana había conseguido arrastrar a muchos aficionados a las gradas.
El Pájara, por su parte, sabía que podía conseguir oro en sus inmersiones en la defensa filial, algo tierna y poco conjuntada.
Así el comienzo de la segunda parte fue eléctrico. En dos minutos, dos goles, uno por equipo.
Sólo dos minutos después del comienzo, una buena jugada local por la banda derecha de Rubiato finalizó con un pase al segundo poste donde estaba Rubén Ramos, sólo, con Ramón tapando el posible disparo, sólo tuvo que empujarla.
Pero el Pájara no se vino abajo. Nada más salir de centro, en la siguiente jugada se fue directo a por la meta de Mario. La defensa atlética cometió falta sobre Héctor. El saque de falta lo peinó Leandro y entró limpiamente en la portería de Mario.
Iguales de nuevo con toda una segunda parte por delante que prometía mucho. Así continuaron los siguientes minutos, pero con el carrusel de cambios salió beneficiado el Atlético. El cansancio se estaba notando en el conjunto canario y las sustituciones no surtieron el efecto deseado.
Como último recurso, Luis Rueda sacó a Toño para buscar remates en los centros y en los balones largos, y cerca estuvo de conseguirlo en el minuto 79 cuando un testarazo del espigado delantero terminó en el larguero.
Aviso para el Atlético de que no se confiara y dejara tan descubierta la zaga. Pero sólo fueron unos minutos de descanso ate lo que estaba siendo un acoso y derribo sobre la meta de Ramón.
Para colmo, los últimos minutos tendría que jugarlos con diez después de la expulsión de Robles en el 89.
Se contaron los minutos muy lentamente. El Atlético estaba totalmente volcado, y el Pájara metido en su área. De echo, las ocasiones que tuvo de salir a la contra no pudo por no tener a gente arriba que pudiera la escasa defensa local y a Mario.
Al final se consiguió el empate, muy sufrido pero que bien valen un punto para mantenerse en mitad de la tabla.
Ficha Técnica:
. - Atlético de Madrid B: Mario; Aitor Núñez, de Abreu (Casabella, min, 75), Domínguez, Raúl Llorente; Didi (Molino, min. 74), Alex Quillo, Raúl Medina, Axel (Joshua, min. 69); Rubiato y Rubén Ramos.
. - Pájara Playas de Jandía: Ramón; Festo (David Martín, min. 71), Casquero, Aguilar, Robles; Aday, Alfonso, Uri, Héctor (µlvaro, min. 75); Leandro (Toño, min. 76) y Saúl.
Goles: 1-0, min. 48, Rubén Ramos; 1-1, min. 50, Leandro.
Árbitro: Olmo Codos (colegio andaluz), expulsó a Robles en el minuto 89 del Pájara. Igualmente amonestó a Raúl Llorente y Casabella por parte del equipo local y a Festo, Casquero y Uri por parte de los visitantes.
Incidencias: encuentro correspondiente a la trigésimo quinta jornada del Grupo I de la Segunda División B, disputado en el estadio del Cerro del Espino de Majadahonda (Madrid), ante unos mil quinientos espectadores.
Vestuarios:
El técnico local, Abrahm García, declaró en rueda de prensa posterior al encuentro que su equipo había perdido una gran ocasión de acercarse a la liguilla de ascenso, que se dejaron empatar y lamentó la gran cantidad de ocasiones de gol falladas.
"No creo que sea una oportunidad perdida tanto por acercarnos a la liguilla, pero da rabia, el que siempre tengamos que ganar los partidos dos veces. Teníamos un rival difícil y los hemos dominado. Les hemos metido un gol y a la mínima nos han empatado. Hemos arrinconado pero no se ha conseguido sacar la victoria", resumió.
"Si no hubieran perdido tantas ocasiones y tanto puntos durante la temporada seguro que nuestra posición en la tabla sería mucho mejor", resumió el técnico sobre la temporada.
"Cada uno propone una cosa, han echo un repliegue defensivo. Eso a nosotros nos hace mucho daño porque no tenemos mucho criterio con el balón. Nos faltaba jugar un poquito por dentro. Hemos rondado la portería. Hay que tener mucha calidad para rematar, y ellos han estado muy bien en defensa. Para hacer gol hay que hilar fino. Es mucho más fácil defender que atacar y ahí ellos han estamos mejor", finalizó.
Por su parte el técnico visitante, Luis Rueda, dijo en la comparecencia tras el choque que el trabajo de sus jugadores fue encomiable, que supieron reponerse del gol en contra y que terminaron algo nerviosos por terminar con uno menos.
"El partido estuvo dominado por el Atlético. Sabíamos que eran peligrosos, que tenían un ataque temible, teníamos que tapar las bandas y a Rubiato. Supimos defender y considero que el resultado es totalmente justo", resumió el técnico visitante.
"Sabíamos que dando unos pasos adelante podríamos conseguir goles con la defensa que tienen", añadió sobre su planteamiento.
"Y al final tuvimos un larguero con el que pudimos llevarnos los tres puntos. Me quedo con que la gente trabajó bien y estuvieron atentos a los cambios tácticos, quedan nueve puntos por jugar y vamos a luchar".
Además, el técnico comentó que tuvo que realizar cambios tácticos ante la ausencia de Iván Zarandona.
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