UD VILLA DE SANTA BRÍGIDA
El Villa se precipita en su propia ansiedad (0-0)
El Villa insistía en las jugadas a balón parado
En esta ocasión, el santuario del Guiniguada se vio desprovisto de acontecimientos épicos, tras el empate a nada (0-0) cosechado por ambos equipos. Ante el irregular ímpetu de los satauteños y la espartana defensa de los peninsulares, el público apenas pudo conciliar ante el anestesiante juego vivido en La Angostura.
Ni siquiera el omnívoro deseo de Toni Cruz -entrenador verdiblanco- por reconducir la nave isleña (optó por un incisivo 4-2-3-1 de salida) sirvieron para amarrar poco más de un punto. Y eso que la escuadra grancanaria tomo la batuta del partido desde el primer minuto. Si bien, sus virulentas acometidas desprendían una incómoda anarquía en los compases claves del encuentro. Ya en el primer minuto, Israel -que salía de titular desdoblándose con Gustavo en la vanguardia- pudo sorprender al meta Gonzalo con un remate ciego y bombeado que acabó lamiendo el larguero.
Sin embargo, el ímpetu ofensivo del Villa se reseñaba más por su víscera que por su elaboración. Apenas conseguían triangular los locales desde su zona de creación. El doble pivote formado por Ángel y Checa apenas conseguía barnizar el juego de ataque y eso pronto lo aprovechó el Sanse, replegando a su jugadores más veteranos en el pulmón de la defensa, distribuyendo sus piezas más noveles (las bajas habían obligado a repescar cuatro jugadores de su filial) en las bandas.
A pesar del pragmatismo orquestado por el preparador alicantino, Alberto Ferri, el conjunto visitante evidenció unas importantes carencias en la parcela ofensiva. Sólo ha marcado 17 goles en lo que lleva de campaña, ocho goles menos que el penúltimo en este particular guarismo, el Fuenlabrada. Con esa preocupante carta de presentación, el contragolpe se postuló como su principal baza -por no decir la única- en una primera parte de efectos narcotizantes.
A balón parado. Por su parte, el Villa insistía en las jugadas a balón parado, pero ni por acumulación de efectivos conseguía desequilibrar la balanza. En el minuto 38 Checa conseguía enganchar un centro de Leroy desde el córner, pero su cabezazo acabó rozando el palo izquierdo. También los madrileños contaron con la suya, aunque fuera con más sorna que ruido. El delantero Redondo remató a bocajarro un golpe franco botado por Ramírez, si bien Lisandro demostró estar atento en su estirada.
En la segunda parte se multiplicaron los contragolpes isleños, aunque su juego, desnudo de estridencias futbolísticas, se tornaba aún más vertical y directo que en la primera parte.
Gustavo apenas encontraba huecos entre la defensa madrileña, y cuando atisbaba un resquicio en el reducido Guiniguada, su premio no era otro que la bandera alzada del linier. Hasta cinco fueras de juego contabilizó el ariete gallego antes de ver la cartulina amarilla -otorgada precisamente por sus reiteradas protestas hacia el trencilla-. Cruz aceleró los cambios (Dudi y Rosmen para apuntalar el ataque, edulcorando la defensa con un ofensivo Orlando), para dar más mordiente al equipo. Pero poco se podía hacer.
En esta ocasión, Gonzalo -posiblemente, el guardameta de mayor envergadura- abortó todas las acometidas verdiblancas. De poco sirvió el remate picado de Jeffrey (min. 75) y el tiro a media altura de Checa segundos después. Incluso con la expulsión de Vázquez en el 87, Rosmen erró un rechace en el área pequeña que bien pudo decantar el encuentro a favor de los locales.
El diván de Toni Cruz empieza a endurecerse en sus texturas. El yermo resultado registrado en el corazón de la Isla presagia un turbio panorama para un equipo que necesita encauzar su permanencia ahora frente al Celta B.
Villa de Santa Brígida, 0
Lisandro, Carreño (Orlando, min. 72), Jeffrey, Alex Hornillo, Jero, Ángel Rodríguez, Cabrera (Dudi, min. 45), Israel (Rosmen, min. 59), Gustavo, Checa y Leroy.
San Sebastián de Los Reyes, 0
Gonzalo, Rubén (Redondo, min. 86), Igor, Jero, Sestelo, Redondo, Oliver (Pulido, min. 79), Egea (Manuel, min. 52), Diego, Álex y Javier.
Árbitro: Gómez González (C. Castellano-Leonés). Expulsó al visitante Javier (min. 87) por una entrada por detrás a Leroy. Amonestó a los locales Jeffrey (min. 13), Carreño (min. 29), Gustavo (min. 53), Alejandro (min. 64), Leroy (min. 80), además de a los visitantes redondo (min. 6), Jero (min. 9), Oliver (20) y Diego (47).
Incidencias: Encuentro correspondiente a la trigésimo cuarta jornada de Segunda B, disputado en el Municipal de Guiniguada, al que acudieron unas 350 personas. La entrada al recinto de La Angostura era gratuito. Acudió al encuentro Juan Manuel Rodríguez, técnico de la UD Las Palmas.
Vestuarios
Cruz. "Tenemos un disgusto muy grande"
Tras desprenderse de toda la tensión acumulada sobre el sintético del Guiniguada, el preparador del Villa de Santa Brígida, Toni Cruz, consideró que el encuentro ante el Sanse «ofreció una lectura muy similar al de hace dos semanas frente al Leganés. Hemos tenido la posesión del balón, además de las jugadas más claras de gol, pero hemos entrado en una dinámica que no nos merecemos. Nos está costando mucho marcar, por lo que la plantilla tiene un disgusto muy grande», recalcó el grancanario.
A pesar del discreto guarismo, el entrenador isleño arengó a sus jugadores afirmando que «todavía dependemos de nosotros mismos para conseguir la ansiada permanencia».
Mediático. Con un discurso muy parecido al que exhibió en el Pepe Gonçálves ante el Universidad (con un 2-0 para los colegiales), el técnico del Sanse, Alberto Ferri, hizo alarde de los números alcanzados por su equipo tras tomar las riendas del club madrileña en navidades: «Conmigo, esta plantilla ha alcanzado 21 puntos y 6 victorias en 17 jornadas. No somos lo más técnicos, pero ahora tenemos un orden táctico y nos vaciamos durante los 90 minutos». Incluso se permitió el lujo de repetir la misma frase que en el pasado encuentro en el recinto capitalino: «Como diría el general Caster, moriremos con las botas puestas».
De la Rosa acudió al encuentro
Tras recibir el alta médica esta semana, el responsable técnico del club satauteño, Pepe de la Rosa, acudió al partido celebrado ayer ante el Sanse, recibiendo además la visita del entrenador de la UniónDeportiva Las Palmas, Juan Manuel Rodríguez.
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