El Tenerife sufrió una desgarradora derrota ante un respetuoso Real Zaragoza que, si bien lució una mayor superioridad en determinados momentos, no mereció tan suculento premio tras los esfuerzos realizados por ambos conjuntos, pero que finalmente supo dar un golpe de autoridad en el Heliodoro Rodríguez López con su segunda victoria a domicilio de la Liga Adelante que, además, le mantiene en puestos de ascenso.
La impetuosa salida al terreno de juego del conjunto local pudo darle sus frutos a los dos minutos, cuando Marc Bertrán proporcionó un serio disgusto a López Vallejo, pero su disparo con el exterior del pie se fue junto a uno de sus postes, mientras que otro de Nino desde fuera del área tomó idéntica trayectoria.
Una vez superado el primer cuarto de hora, una acción generosa de Zapater le costó un serio disgusto a López Vallejo, puesto que un erróneo despeje cayó en las botas de Nino que, sin pensárselo, conectó un fuerte disparo que un bien colocado cancerbero atajó con seguridad. Pero a partir de ahí, los de Marcelino no sólo maniataron a su rival durante una buena fase del encuentro, sino que, además, causaron serios estragos entre la hueste local, además de chutar a puerta con mucho peligro, como un disparo de Gabi desde el borde del área que se fue fuera por muy poco.
Al filo de la media hora fue el brasileño Ricardo Oliveira el que desaprovechó una clara ocasión ante Aragoneses, pero instantes después fue Arizmendi el que sí perforó el marco local con un disparo con la pierna izquierda que entró junto a uno de los palos del meta. Nino contestó a Arizmendi Así concluyó la primera parte, para dar paso a otra en la que se reprodujeron los mismos patrones de los instantes iniciales, aunque esta vez con mayor eficiencia local y, sobre todo, con una actitud mucho más atrevida y enérgica por parte de los de José Luis Oltra.
Juanlu fue el primero en tentar a López Vallejo con un disparo lejano, poco después fue Kome el que emuló a su compañero y sobre el minuto sesenta fue el centrocampista Alfaro quien también intentó batirle, pero tuvo que ser Nino, siempre Nino, el que mediado el segundo tiempo encontró una oportuna brecha para introducir el balón en el marco visitante tras una buena contra llevada por Juanlu.
Pero esta igualada en el marcador infundió renovados bríos al Zaragoza, que de nuevo supo zafarse del asedio al que les tenían sometidos y primero Oliveira y poco después Ewerthon erraron sendas ocasiones cuando se plantaron solos ante el meta Sergio Aragoneses.
Cuando el empate parecía que sería definitivo llegó la puntilla definitiva en la recta final del choque, cuando el meta Aragoneses impidió una penetración en el área de Ewerthon, acción que el árbitro estimó como penalti y que el propio delantero brasileño -en la imagen celebrando el primer gol de su compañero Arizmendi- se encargó de materializar. Enfrente el centrocampista Alfaro, que se tuvo que poner los guantes de portero ya que el derribo supuso la expulsión del meta titular cuando el Tenerife ya había realizado los tres cambios. El joven medio lo intentó, pero no pudo detener el lanzamiento del brasileño, que deja al Zaragoza en puestos de ascenso por quinta jornada.EFE |
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