Fuerteventura esa estrecha y larga!!
Fuerteventura, esa estrecha y larga:
Sonó temprano el despertador, la mañana iba a ser densa, 130 km separaban nuestro alojamiento al sur de la isla en Morro Jable con la localidad norteña de Corralero. El sol picaba más de la cuenta, pero el continúo viento moderado de esta isla más los 24 grados centígrados perennes que marcaba el termómetro digital cercano al hotel, hacían prever buena mañana de fútbol.
Con tiempo suficiente para recorrer sinuosas carreteras en medio de la nada, salimos en dirección al pueblo de La Oliva, supuesta villa en dónde se debía jugar el partido, por encontrarse en obras “Los Pozos”; con 20 minutos de antelación llegamos a un campo en dónde el único que jugaba al fútbol era un chaval de 4 años cuyo padre le pasaba mansamente la pelota, y que cuando nos vio aparecer pensó: “por fin mi hijo va a jugar con alguien”,
La Oliva es como casi todos los municipios de allí, poca gente, poca juventud y aislado por montes y tierra, el caso es que existió mal entendido con las indicaciones que nos dio el club, y el partido iba a empezar en un cuarto de hora en un pueblo que estaba más al norte (Corralero) que pertenece al municipio de la Oliva, pero que obviamente no es el mismo pueblo, gracias a Dios la distancia que marcaba en el mapa facilitado en el aeropuerto no se correspondía en absoluto con la que realmente era, y con tan sólo 8 minutos sobre las doce, hora insular, llegamos con el partido a punto de comenzar al Vicente Carreño; campo en dónde si a día de hoy no ha pasado nada grave, es porque los majoreros no son todos ellos, lo cafres que han llegado a ser en otros campos vecinos (San Isidro por ejemplo), aunque como en todos lados, algunos no se libran de la quema, porque es un campo sin protección alguna, ni vallas que separen a público de jugadores, y con unos guardias civiles, que hacen más de lo segundo que de lo primero, más de civiles que de guardias, algún día puede pasar algo más de lo que pasó ayer... porque si piensan (los que no se libran de la hoguera) que vociferando al viento cosas como: “madrileñossss, que no tenéis playa!” ó “que os vais a quemar con el sol”, pueden encender alguna mecha, es que no han visto arder Butarque en días como el de la semana pasada, y así debieran ser recibidos a la vuelta, con un campo no hostil, pero Sí como si fuese una caldera, una olla a presión en donde con el día más nublado, sin un rayito de sol, saliesen bien churruscaitos y arrugaos, como las papas, porque metieron presión y muchos se metían en cosas que no eran de su incumbencia, y porque acabaron desquiciando a un juez de línea que junto con el balear Ripoll Solano estaban llevando un partido muy bien arbitrado, hasta que después de aguantar (el asistente) gritos a medio metro durante un buen rato, no levanto el banderín en un claro fuera de juego y prefirió seguir corriendo, supongo yo porque tiene que acompañar la jugada, pero más por quitarse de la nuca al pesado que se había acordado de su madre una docena de veces.
Suena a crónica sin fútbol, pero es que se resume fácil el encuentro: primer cuarto de hora de claro dominio pepinero con seis corners botados en los primeros 20 minutos, y una falta en la frontal que envio alto Javi Vicente, ellos, poco arriba; segundo tercio del partido en el que ni tuya ni mía pero con un Zarandona tremendo, y con un Valleros y July muy activos. De ahí, a la jugada del gol local, en dónde pillan a Bermudez en superioridad numérica y meten un muy buen balón a Memo que se adelanta a los centrales y la mete ante la imposibilidad de Raúl de atajar la bola.
Cuando se escuchan gritos de: “mira como juegan estos…. Al patadón” llego la mejor conexión: Nacho Aznar, pared con July, se logra ir en velocidad de Casquero y cuelga un balón franco a media altura, para que Javi Vicente entrado sólo al segundo palo la enchufe con la zurda para adentro. Uno a uno, empate, descanso, y lo mejor que le puede pasar a un equipo, que después de mojar al final del primer episodio, lo hagas al comienzo del segundo: recuperación de Zarandona ante 2 adversarios en el circulo central, July que le tira el desmarque desde su campo, le llega la bola y a correr…. Cuando llega al vértice del area grande levanta la cabeza, ve a Quini, que de fantástica maniobra se deshace del central y por raso bate a Novoa haciendo el segundo. Desde entonces hasta el cambio que hace José Juan Almeida, sustituyendo en la banda izquierda a Suso y metiéndo a Moisés el partido se mantuvo en tablas tácticas. Éste Moisés es un jugador de banda izquierda, fortísimo, con buen golpeo de balón y muy malas artes, metió más encima al público, le pegó un codazo a Negral en el cuerpo y previas palabras del leonés diciéndole que le iba a dar tal mamporro que le mandaría cerca, llego el balón entre líneas con un Memo adelantado (sin insultar) que bajó el balón con la cabeza y definió como un grande ante la salida del capi, empate a 2 en el 87 y a esperar a que sacasen la tablilla… achuchaban, empezaron a sacar corners y la tabla de descuento con 3 minutos apareció en el minuto 92, es decir que si el arbitro hacía lo correcto sólo descontaría 60 segundos más; un corner más, a favor del Fuerteventura, nervios en la grada, mal saque…. patadón (ahora sí) y final…. Buen arbitro….. pero buen resultado?. Sabor agridulce la victoria estaba en el bolsillo pero… un punto que bajo mi punto de vista y viendo otros resultados es bueno, ganando al Mérida el próximo domingo y……. yo creo que lo será. Amén.
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