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11-feb-2009
Almeida: "Daré facilidades"
El dimitido entrenador de la UD Fuerteventura negociará hoy la rescisión de su contrato Asegura no querer perjudicar a sus jugadores.
José Juan Almeida espera formalizar hoy la rescisión del contrato que le unía con la UD Fuerteventura. El dimitido técnico asegura que dará "facilidades" en la negociación del finiquito, ya que no quiere "perjudicar a unos futbolistas que han dado la cara". El tinerfeño Ángel Luis Camacho, que era su ayudante, dirigirá la sesión de trabajo de hoy, aunque no se puede descartar que el club busque un nuevo entrenador. El conejero Juan Antonio Machín, actualmente en activo en el Victoria de Tazacorte, está bien valorado en la UD Fuerteventura. Perdida la ilusión por continuar su labor, no hay marcha atrás en la decisión de abandonar de Almeida.
"Cuando te falta la ilusión, tienes que dejar paso a otra gente; sucede en el fútbol y en cualquier otra faceta, es ley de vida", comentaba ayer a esta Redacción el dimitido técnico, que no aclaró las razones por las que la ganas de seguir desaparecen, limitándose a manifestar que "la ilusión se pierde por muchas cosas".
José Juan Almeida tiene claro que su dimisión es irrevocable. "Todas mis decisiones son muy meditadas y ésta aún más. El tiempo, al final, da y quita razones, pero no hay vuelta atrás", reconoció, para afirmar que ahora pasará "a ser el aficionado número uno de la UD Fuerteventura".
"No van a poder convencerme, no voy a cambiar de idea", añadió el técnico, que reconoció que el pasado mes de noviembre, cuando también se planteó abandonar el cargo, "fueron los futbolistas los que hicieron que me quedara".
El ya ex preparador del cuadro verdillo intentará poner los menos obstáculos posibles al club en su salida. "Está todo hablado, ahora queda sentarse y finiquitar el contrato. Soy consciente de la situación de la entidad y no puedo pretender cobrarlo todo de golpe y porrazo, perjudicando a unos futbolistas que han dado la cara", explicó José Juan Almeida.
En su despedida el técnico tiene palabras de agradecimiento para los jugadores, a los que, opinó, "se les debería hacer un monumento". "Me gustaría ver a muchos de los que nos critican trabajando sin cobrar siete meses y, después, rebajándose el sueldo", añadió. De todos modos, la difícil situación económica de la UD Fuerteventura en el presente no ensombrece, según Almeida, los "casi cinco años" que ha permanecido al frente del equipo. "Ha sido sólo un año malo. Siempre le estaré agradecido al club", remarcó.
En todo este tiempo ha dirigido 178 encuentros de Liga regular al cuadro de Puerto del Rosario, al que llegó desde el Doramas, de Preferente, en el verano de 2004. Atrás quedan dos temporadas en Tercera División y otro par, además de los 24 partidos de la presente campaña, en Segunda B. Un ascenso a esa categoría y la participación en un "play off" a Segunda A tras acabar la UD Fuerteventura en tercera posición son sus mayores logros colectivos. Durante esta etapa, la cantera majorera ha tenido especial protagonismo en la plantilla.
El ya ex entrenador espera que sea su ayudante Ángel Luis Camacho el que tome las riendas del grupo. "Me gustaría que él siguiera, para dar continuidad a algún proyecto. Además, sería lo más sensato, ya que conoce a la plantilla y los métodos de trabajo", comentó Almeida, que no duda en que la UD Fuerteventura mantendrá la categoría en los terrenos de juego, pese a las siete bajas registradas recientemente.
La opción Ángel Luis
Ángel Luis, por su parte, reconoció el pasado lunes que él se debía a Almeida, ya que su contratación fue una petición del técnico saliente, aunque también, pensando en los jugadores, debería asumir la dirección. El único obstáculo para su definitivo ascenso es que la convalidación de su título de entrenador nacional requiere haber completado un año de prácticas; las mismas las realizaba actualmente en el cargo de segundo entrenador. Raúl Figueroa, entrenador del segundo equipo verdillo, también posee el título de entrenador nacional, si bien no se puede descartar que la UD Fuerteventura busque el recambio para su banquillo fuera del club.
"Cuando te falta la ilusión, tienes que dejar paso a otra gente; sucede en el fútbol y en cualquier otra faceta, es ley de vida", comentaba ayer a esta Redacción el dimitido técnico, que no aclaró las razones por las que la ganas de seguir desaparecen, limitándose a manifestar que "la ilusión se pierde por muchas cosas".
José Juan Almeida tiene claro que su dimisión es irrevocable. "Todas mis decisiones son muy meditadas y ésta aún más. El tiempo, al final, da y quita razones, pero no hay vuelta atrás", reconoció, para afirmar que ahora pasará "a ser el aficionado número uno de la UD Fuerteventura".
"No van a poder convencerme, no voy a cambiar de idea", añadió el técnico, que reconoció que el pasado mes de noviembre, cuando también se planteó abandonar el cargo, "fueron los futbolistas los que hicieron que me quedara".
El ya ex preparador del cuadro verdillo intentará poner los menos obstáculos posibles al club en su salida. "Está todo hablado, ahora queda sentarse y finiquitar el contrato. Soy consciente de la situación de la entidad y no puedo pretender cobrarlo todo de golpe y porrazo, perjudicando a unos futbolistas que han dado la cara", explicó José Juan Almeida.
En su despedida el técnico tiene palabras de agradecimiento para los jugadores, a los que, opinó, "se les debería hacer un monumento". "Me gustaría ver a muchos de los que nos critican trabajando sin cobrar siete meses y, después, rebajándose el sueldo", añadió. De todos modos, la difícil situación económica de la UD Fuerteventura en el presente no ensombrece, según Almeida, los "casi cinco años" que ha permanecido al frente del equipo. "Ha sido sólo un año malo. Siempre le estaré agradecido al club", remarcó.
En todo este tiempo ha dirigido 178 encuentros de Liga regular al cuadro de Puerto del Rosario, al que llegó desde el Doramas, de Preferente, en el verano de 2004. Atrás quedan dos temporadas en Tercera División y otro par, además de los 24 partidos de la presente campaña, en Segunda B. Un ascenso a esa categoría y la participación en un "play off" a Segunda A tras acabar la UD Fuerteventura en tercera posición son sus mayores logros colectivos. Durante esta etapa, la cantera majorera ha tenido especial protagonismo en la plantilla.
El ya ex entrenador espera que sea su ayudante Ángel Luis Camacho el que tome las riendas del grupo. "Me gustaría que él siguiera, para dar continuidad a algún proyecto. Además, sería lo más sensato, ya que conoce a la plantilla y los métodos de trabajo", comentó Almeida, que no duda en que la UD Fuerteventura mantendrá la categoría en los terrenos de juego, pese a las siete bajas registradas recientemente.
La opción Ángel Luis
Ángel Luis, por su parte, reconoció el pasado lunes que él se debía a Almeida, ya que su contratación fue una petición del técnico saliente, aunque también, pensando en los jugadores, debería asumir la dirección. El único obstáculo para su definitivo ascenso es que la convalidación de su título de entrenador nacional requiere haber completado un año de prácticas; las mismas las realizaba actualmente en el cargo de segundo entrenador. Raúl Figueroa, entrenador del segundo equipo verdillo, también posee el título de entrenador nacional, si bien no se puede descartar que la UD Fuerteventura busque el recambio para su banquillo fuera del club.
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