sábado, 30 de agosto de 2008

La UD, que por claras oportunidades mereció ganar, acabó perdiendo por la mínima ante la Real Sociedad

Dos balones a los palos y una doble ocasión en la misma jugada pudieron cambiar el signo del partido

La UD, que por claras oportunidades mereció ganar, acabó perdiendo por la mínima ante la Real Sociedad

La defensa amarilla no tuvo problemas, pero.../ACFIPRESS

La defensa amarilla no tuvo problemas, pero.../ACFIPRESS

La máxima futbolera que señala que 'el que perdona acaba siendo ejecutado' o que 'el que perdona lo paga' se cumplió una vez más en Anoeta, donde la UD Las Palmas cayó frente a la Real Sociedad (1-0). La UD cuajó un partido muy serio, mostrando una imagen para la ilusión, llegando con mucha claridad a los dominios del meta rival -gozó de hasta tres oportunidades muy claras, con dos balones a las maderas y otros dos sacados bajo palos por Castillo en la misma jugada- y con un Roberto Santamaría que no tuvo que intervenir en los 90 minutos. Sin embargo, perdonó y en una falta en la frontal del área Sergio Rodríguez logró el único tanto del choque al ejecutarla de forma magistral.

Los amarillos salieron desde el pitido inicial con ganas de llevarse los tres puntos y así apenas transcurrido el primer minuto ya llegaba la primera gran oportunidad isleña en un córner que puso Dani López para que Marcos Márquez, en pugna con el portero y un zaguero, cabeceara de espaldas a la meta dentro del área pequeña. El balón parecía irse hacia el fondo de la red, pero la suerte se alió con los locales ya que el esférico se encontró con el larguero y botó un poco por delante de la línea de gol.

A partir de ahí la Real tenía más el balón, pero Santamaría vivía una tarde plácida. Los donostiarras, fiel al juego de Lillo, tocaban y tocaban, pero no se aproximaban al área amarilla, hasta el punto de desesperar a sus propios aficionados, que por minutos empezaron a dedicar algún silbido a su equipo.

La UD esperaba su oportunidad, aunque a sus contras les faltaba el último pase. Al filo del descanso esa última asistencia sí llegó, pero entonces la mala suerte volvió a vestirse de amarilla. En una perfecta contra Pablo Sánchez se va por la izquierda y pone un balón al corazón del área que remató con la zurda a la primera Marcos Márquez. El 'Matador' se encontró con el ex jugador amarillo Xabi Castillo bajo palos. Pero la fortuna local fue más allá porque se repitió el remate del andaluz y también el despeje en la línea de gol del '2' donostiarra.

El nerviosismo local era evidente y al descanso el público dedicó pitidos a su equipo. En la reanudación se esperaba que los de Lillo reaccionasen, pero lejos de producirse esa mejoría fue la UD la que, como en el primer tiempo, mantuvo el control del juego. Si bien el esférico estaba más en poder de los anfitriones, eran los amarillos los que no pasaban apuros y los que sí que hacían sufrir a los seguidores locales.

En esa tesitura llegó una nueva ocasión inmejorable para los visitantes. A los tres minutos Sergio Suárez rompe el fuera de juego y se planta sólo ante el chileno Claudio Bravo. El meta supo aguantar bien al canterano amarillo, que se fue hacia la derecha y forzado por el cancerbero disparó para estrellar el balón en el palo.

A partir de ahí el juego siguió en la misma dinámica pero a la UD le empezaba más empezar a salir en la contra. En el bando local era el ex amarillo Xabi Castillo el que intentaba empujar a su equipo, pero Santamaría seguía viviendo una tarde tranquila. Juan Manuel Rodríguez dio entrada entonces a Saúl por Sergio Suárez, pero el asturiano apenas entraba en juego.

Los minutos pasaban y tras una primera parte tranquila para el colegiado, el riojano Romualdo Caballero Herreros, empezaron las primeras brusquedades, lo que provocó que aparecieran tres tarjetas casi consecutivas y el juego se empezara a trabar un poco más.

Cuando más controlado parecía el juego por el bando isleño llegó el mazazo. Una falta a poco más de cinco metros de la frontal del área la ejecutó magistralmente Sergio Rodríguez para colar el esférico pegado al palo derecho de Roberto Santamaría, que se quedó haciendo la estatua. La UD intentó reaccionar entonces. Primero Pablo Sánchez lo intentó de lejos, pero se encontró con Bravo. Después, Francis Suárez entró por David García, pero entonces la Real se supo defender a la perfección y los amarillos regresan de Anoeta con cero puntos pero con una imagen muy diferente a la ofrecida en el primer partido del pasado año.

Ficha técnica:

1 - Real Sociedad: Bravo; Gerardo, Labaka, Mikel González, Castillo (Moha, min. 73); Aranburu, Elustondo, Marcos García (Estrada, min. 81), Xabi Prieto, Sergio (Rivas, min. 90); Díaz de Cerio.

0 - Las Palmas: Santamaría; David García (Suarez, min. 81), López Ramos, Samuel, Dani López; Nauzet Alemán (Darino, min. 75), Cobas, Sergio (Saúl, min. 56), Jorge Larena, Pablo Sánchez; Marcos Márquez.

Arbitro: Caballero Herreros (La Rioja). Amonestaciones a Marcos García, Estrada, López Ramos, Larena.

Goles: 1-0, min. 78: Sergio Rodríguez.

Incidencias: 15.000 espectadores en el estadio de Anoeta. Se guardó un minuto de silencio en memoria de los fallecidos en el accidente aéreo de Barajas.

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