La UB Conquense cedió los tres puntos y dejó mala imagen entre los aficionados de Cuenca, que acudieron a La Fuensanta para ver a un equipo que empezó muy bien, creando peligro sobre la portería visitante. En la segunda mitad los locales se quedaron sin ideas y lo acabaron pagando con un gol recibido en un contragolpe. En el partido, y cuando nadie lo esperaba, acabó cumpliéndose el tópico futbolístico de que cuando perdonas, lo acabas pagando.
Las cosas empezaban bien en un partido en el que los tres puntos valían algo más, pues ambos equipos se perfilan como candidatos a la lucha por evitar el descenso directo a terceradivisión. Tras un inicio un poco parado, los blanquinegros empezaron a trenzar jugadas y a llegar con facilidad a la meta defendida por David. Primero avisaba adrián Martín con un disparo desde la frontal ligeramente desviado y después Dani Martí remataba de cabeza un centro desde la derecha de Cristian que hacía esforzarse al portero visitante.Vinuesa culminaba estosprimeros minutos con un disparo en semifallo tras recibir el balón después de una serie de rebotes.
La primera intervención de Caballero no llegó hasta el minuto 15, cuando Yeray Ortega realizaba una jugada individual por la banda izquierda y Míchel aprovechaba un desajuste defensivo para disparar.La primera llegada del conjunto rojillo era un espejismo, pues el Conquense estaba gustando mucho a la afición, con una equilibrada combinación de juego de toque y balones aéreos para Vinuesa, que cabeceó o controló todos y cada uno de los centros que le llegaban.
En el minuto 20 de partido, Dani Rodríguez aprovechaba el enésimo balón peinado por Vinuesa para plantarse en el mano a mano con David, que volvía a aparecer para salvar a su equipo. Dado el gran estado de forma del único delantero del conquense, los blanquinegros empezaron a buscarle en exceso con balones aéreos que Vinuesa recibía pero que no sorprendían a los visitantes. La media hora de partido se cumplía con un disparo desde la frontal de Adrián Martín y un mano a mano del delantero blanquinegro, ambos rechazados por la gran actuación de David bajo los palos. Si el Conquense no se adelantó en la primera mitad fue por el mérito del meta, que sacó un recital con sus mejores paradas para atajar el balón siempre que la afición se disponía a cantar el primer
tanto. Cerca del minuto 35, lo volvía a demostrar con una estirada por bajo para desviar a córner un zapatazo desde la frontal de Dani Rodríguez.
Jugada desafortunada
Los visitantes estaban dispuestos a cortar el ritmo al partido por lo civil o lo criminal, como así quedó demostrado con una agresión de Yeray Ortega a Cristian, rompiéndole la ceja en un forcejeo. Juli Ferrer entró al trapo y devolvió la agresión con un manotazo, recibiendo la correspondiente tarjeta amarilla. En la misma jugada fue amonestado Javi Selvas por protestar, por lo que ninguno de los dos centrales podrá jugar el próximo partido ya que ambos deben cumplir la sanción por acumulación de tarjetas.
El ambiente estaba caldeándose y el público de La Fuensanta pidió la explusión para Pollo por una entrada en la que no tenía intención de jugar el balón. Finalmente el árbitro decidió solo amonestar en un pisotón que, si no era de roja, era, como mínimo, naranja. Por cierto que en esta jugada al que sí expulsó el colegiado valenciano Carbonell Hernández fue a Jorge Heredia, preparador físico del Conquense, por protestar. La primera parte terminaba con la segunda llegada de los rojillos, que era despejada con muchos problemas por Morillas, que casi se hace un autogol al intentar repeler el disparo.
Comienza el despropósito
La segunda mitad empezaba con los visitantes decididos a controlar el ritmo y el balón, y con los de Cuenca buscando su sitio en el campo. No hubo cambios en ninguno de los equipos, pero tras la reanudación daba la impresión de que estaban sobre el terreno de juego otros 22 futbolistas distintos. Los visitantes empezaban a llegar sobre la portería local pero sin crear peligro para Caballero, que no tuvo que esforzarse demasiado para mantener su portería a cero. El Conquense se estaba olvidando de jugar al fútbol, pues su única apuesta ofensiva pasaba por jugar al pelotazo buscando a Vinuesa, que en la segunda parte no tuvo tanta presencia en los centros a la frontal. El único futbolista que trataba de dirigir el juego en estos minutos era Cubillo, que además de participar en labores defensivas, trataba de organizar a sus compañeros y bajar el balón al suelo para devolver las cosas a donde estaban.
Al cuarto de hora de la segunda parte, el Conquense marcaba un gol en una jugada a balón parado que fue anulado por fuera de juego posicional de Vinuesa. Pocas ocasiones estaba creando el Conquense en la segunda parte, por lo que Cabrera optó por sacar al terreno de juego a Mauri para ayudar a Vinuesa, que estaba desapareciendo por momentos y a Jorgito por Adrián Martín, y el canterano tampoco hizo de revulsivo. Tampoco creaba peligro el equipo visitante pero
el público de la nueva Fuensanta empezaba a impacientarse, por lo que se escucharon algunos pitos cuando no había buenos centros o éstos no llegaban a nadie. La afición criticó con una pitada la entrada de Marcelo al terreno de juego, ya que el técnico canario eligió a Cubillo para realizar la sustitución. Los minutos pasaban y parecía que ambos equipos iban a firmar el empate.
Cuando ya estaba a punto de concluir el partido, en una aburrida segunda parte sin oportunidades, el Conquense se volcó al ataque, y lo pagó caro, ya que Yeray Ortega aprovechó un hueco en la zaga blanquinegra, concretamente por el carril de Morillas, para llegar hasta el área y ceder un pase de la muerte para que Moisés adelantara en el minuto 93 a los visitantes. Pudo empatar el Conquense en los últimos segundos de partido con una doble ocasión de Vinuesa, pero una vez la madera y otra vez un defensa bajo palos evitaron que el Conquense obtuviera al menos un punto.
Al final, fueron los canarios los que se llevaron una injusta victoria, ya que el Conquense mereció ganar pero perdonó y lo acabó pagando muy caro, pues los pocos aficionados que no se habían marchado ya del estadio despidieron a los blanquinegros con una pitada.
FICHA TÉCNICA
UB CONQUENSE:Caballero, Jorge Campos, Morillas, Juli Ferrer, Javi Selvas, Dani Martí (Mauri, minuto 67), Dani Rodríguez, Cubillo (Marcelo, minuto 84), Adrián Martín (Jorgito, minuto 74), Vinuesa y Cristian.
UD VECINDARIO: David, Simón, Fran, Eduardo, Pollo (Moisés, minuto 62), Badayco, Míchel (Rubén Quesada, minuto 92), Óscar (Ventura, minuto 86), Yeray Ortega, Yeray López y Maikel.
GOLES: 0-1, minuto 93, Moisés.
ÁRBITRO: Dirigió el encuentro el colegiado Carbonell Hernández, del colegio valenciano, asistido en las bandas por Perea Parres y López Herrero. amonestó a Juli Ferrer, Javi Selvas y Cristian, por el Conquense, y a Yeray Ortega por el Vecindario.
INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la vigésimo cuarta jornada del Grupo I de Segunda División B, disputado a las 12:00 en el Estadio Municipal de La Fuensanta ante 1100 espectadores.
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