Vitolo y Quiroga, los errores
arbitrales y la falta de pegada condenan a los de Iñaki Alonso, que solo
llevan un triunfo en las últimas siete jornadas
MANUEL SÁNCHEZ BREIS.-
Seis derrotas en los últimos siete encuentros y la suma de tres puntos de los últimos 21 son números lo suficientemente relevantes como para saber que el Real Murcia atraviesa por su momento más delicado de la temporada. Los grana han vuelto a perder en Nueva Condomina y, en esta ocasión, lo han hecho contra la UD Las Palmas. Un partido que seguramente no mereció perder, pero en el que la falta de pegada, un mal inicio de partido y algunos errores arbitrales han provocado un nuevo tropiezo liguero.
Vitolo en el minuto diez adelantó al cuadro insular solo un minuto después de que Javi Guerrero perdonara la vida a los locales. Dos errores defensivos que valieron para que el cuadro canario se adelantara en el marcador. El miedo y las imprecisiones protagonizaron unos minutos en los que jugadores como Emilio Sánchez o Richi no aparecieron en ningún instante.
Con la jugada del gol del empate todo cambió. Cristian García asistió a Emilio para que éste batiera a Mariano Barbosa, guardameta al que ya le marcó en la primera vuelta. El Real Murcia mejoró y se adueñó del partido, pero no consiguió crear grandes oportunidades de gol.
Los mejores minutos llegaron al comienzo de la segunda parte, período en el que Del Burgo Bengoechea, árbitro del partido, perjudicó gravemente a los grana. El arbitro perdonó la expulsión a Vitolo en un par de ocasiones, mostró tarjeta a amarilla Diego Hermer cuando bien pudo enseñar la roja, y dio por válido el gol de Quiroga, conseguido, aunque por poco, en fuera de juego.
Tras el segundo tanto amarillo la Unión Deportiva pudo sentenciar y el Real Murcia desapareció por completo de un encuentro que una vez más terminó con derrota en Nueva Condomina.
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