domingo, 28 de agosto de 2011

Una ocasión, un disparo y un punto en Guadalajara (1-1)

Una ocasión, un disparo y un punto en Guadalajara (1-1)

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 - Corrales corta el avance del ex amarillo, Joseba Arriaga, ahora en las filas del CD Guadalajara (Nueva Acarria.com)

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La sociedad del gol Viera-Vitolo arregla un encuentro que se había complicado con la expulsión de Sergio, a la media hora de juego. Los amarillos acabaron exhibiendo su mejor condición física con uno menos en el campo

La UD Las Palmas dejó el trabajo a medias en Guadalajara, aunque tuvo que remontar una situación tan adversa como fue la de quedarse en inferioridad numérica a la media hora por la expulsión de Sergio. El partido lo arregló la sociedad del gol (Viera-Vitolo) cuando el conjunto grancanario afrontaba una segunda parte incierta y con el marcador también en situación desfavorable. La del 1-1 fue la única combinación isleña hasta las profundidades del área alcarreña, la única ocasión de peligro pero la selló Vitolo con un disparo a puerta vacía que rescataba un punto y dejaba también una macedonia de sabores que fueron destilándose durante el partido.

La UD Las Palmas tiene mucho más fútbol que lo demostrado esta tarde en Guadalajara. Pareció que lo iba a extraer tras controlar el juego -sin profundidad, eso sí- en la primera media hora. Desplegaba piezas en terreno adversario y obligaba al conjunto alcarreño a refugiarse. Pero la primera víctima de esta temporada fue el crédito arbitral. La segunda tarjeta, en exceso rigurosa, mostrada a Sergio precipitó acontecimientos. El gemelo cometió una de tantas faltas que se produjeron antes y después de ese minuto, pero Aller Valdés entendió que era merecedora de una nueva cartulina. Esa acción rompió el guión del partido porque colocó el Guadalajara en posición de tomar las riendas. A falta de otros recursos, el cuadro local buscó la portería de Barbosa con acciones de pundonor y orden. Ya había acariciado en una jugada de estrategia el gol con un remate de Jonan que repelió el poste, pero el 1-0 se estableció casi al descanso tras un centro comprometido de Ernesto que el defensa Ruymán desvió en la dirección a la portería canaria.

La verdadera UD Las Palmas asomó levemente su hocico en la segunda mitad. Aún con diez se adueñó del partido con un despliegue táctico más razonable y una condición física insultante, en relación a su oponente. Juan Manuel introdujo una variante que desconcertó a su colega Terrazas: eliminó al ariete Quiroga, demasiado previsible esta tarde, creando un vacío entre los centrales con la cercanía de Vitolo. Los amarillos tardaron en fabricar el gol, pero lo hicieron con una jugada de tiralíneas entre los amigos de filiales. Viera, Vitolo y también Guerrero, que escoltaba la acción de contragolpe desde la izquierda, rompieron la línea Maginot alcarreña para elaborar el 1-1, que no encontró apelación.

La media hora final, sin embargo, resultó decepcionante. No por el esfuerzo del conjunto grancanario, desgastado en cada una de las jugadas, sino porque el Guadalajara pareció agotado y se entregó a su suerte para proteger ese raquítico punto que le quedaba. Sin embargo Las Palmas no encontró ese último disparo que remachara el partido. Había sido un premio excesivo; el punto sabe, pero queda la sensación de que el equipo canario acudió al Pedro Escartín con potencial suficiente para haber regresado con todo el botín.

Manuel Borrego

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